Estambul es una ciudad fascinante que une dos continentes, Europa y Asia, y que ofrece una gran variedad de atractivos turísticos, culturales y gastronómicos. Algunos de los lugares que no puedes perderte en Estambul son: Santa Sofía, una antigua basílica convertida en mezquita y luego en museo, que es una obra maestra de la arquitectura bizantina y otomana: la Mezquita Azul, una de las más bellas y emblemáticas de la ciudad, que debe su nombre a los azulejos que decoran su interior; el Palacio de Topkapi, la residencia de los sultanes otomanos durante siglos, que alberga un impresionante tesoro, un harén y unas vistas espectaculares del Bósforo; el Gran Bazar, el mercado cubierto más grande y antiguo del mundo, donde podrás encontrar todo tipo de productos, desde especias y joyas hasta alfombras y lámparas, y el Bósforo, el estrecho que separa Europa y Asia, y que se puede recorrer en un crucero o en un ferry, admirando los palacios, las fortalezas y los puentes que lo bordean.